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Compleja, heterogénea y ambigua; la joyería contemporánea ha supuesto una nueva forma de concebir la práctica joyera, desplegando su vertiente artística y creativa. La creación de objetos usables, que comparten la misma misión que el arte contemporáneo: cuestionar los gustos preestablecidos, las normas y los límites de la práctica artística. Esa nueva forma de conceptualizar la joyería ha promovido la innovación en los talleres de joyería artesana. Utilizando distintos materiales como recurso expresivo, sin abandonar las formas de trabajar ancestrales, Majoral ha encontrado un espacio en el que desarrollar su práctica creativa, logrando evocar imágenes y transmitir sensaciones a través de su diseño.

Enric Majoral ha desarrollado su práctica joyera desde el autoaprendizaje, utilizando la joyería como una herramienta de expresión artística. La búsqueda insaciable de Majoral alrededor del volumen y el espacio en las joyas, ha permitido crear un diálogo dinámico entre el cuerpo, la joyería y el espacio. La pintura acrílica, el titanio, el nylon e incluso la lana y la seda pueden ser materiales utilizados en joyería, capaces de generar harmonía junto a metales preciosos más recurrentes, como el oro o la plata. En este artículo os mostramos algunas colecciones donde Majoral ha incorporado materiales poco tradicionales en sus creaciones.

La colección Pluja es uno de los principales casos donde conviven materiales nobles con un material tan humilde como son los hilos de nylon. Esa combinación da paso a una colección atrevida y provocativa, joyas diferentes y un ejemplo de la capacidad de la joyería contemporánea de romper cánones. El nylon, también conocido como poliamida, es una fibra sintética apreciada por su resistencia y flexibilidad. En Pluja el nylon se pone al servicio del joyero, jugando un papel determinante al unir los círculos de oro o plata, emulando las gotas de agua caídas de forma arbitraria en un día de lluvia. La flexibilidad del nylon propicia que los discos de metal se muevan tintineando sutilmente creando joyas alternativas, impactantes.

Bots: el reto de pintar un metal noble

La plata es un metal noble altamente apreciado en la joyería; se trata de un material luminoso, maleable y dúctil. Su brillo blanco permite que sea combinado elegantemente con color. Majoral ha usado diferentes tonos de pintura acrílica azul, índigo, rojo o verde para pintar sus joyas. Es el caso de la colección Bots, donde sobresalen joyas que combinan el plateado con el azul profundo, en pinceladas de pintura acrílica añadidas en el taller. El resultado es una colección formada por pequeños botes enlazados, que juntos crean piezas con juegos volumétricos sencillos pero inspiradores. El azul del cielo y el mar es transportado al interior de los botes, convirtiéndolos en pequeños contenedores que salvaguardan la pureza del Mediterráneo.

Materiales concebidos como sustancias vivas y cambiantes

Majoral se relaciona con la materia como sustancia viva y cambiante, singular, concreta, heterogénea, que impone sus propios límites, tiempos y procedimientos. Un diálogo cuerpo a cuerpo con cada fragmento de material que da forma y volumen a sus joyas. Otros ejemplos de la capacidad de romper límites a través del uso de la innovación en la joyería lo encontramos en las joyas de creación de Majoral. Las piezas únicas “Joyas Mohair” de Enric Majoral incorporan un material tan cotidiano y humilde como la lana. “La brillantez que pide una joya preciosa la conseguimos con un material antiguo, humilde y cercano como la lana, con un poco de seda”, explica Enric Majoral.