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La joyería contemporánea en Barcelona: el ejemplo de Majoral
A pesar de recibir la inspiración de Formentera, la joyería contemporánea de Majoral ha tenido siempre una fuerte vinculación con la ciudad de Barcelona. Con el paisaje y la cultura mediterránea como referente, la obra de Majoral se convierte en un nombre clave en el transcurso de la joyería contemporánea catalana. .
Considerada uno de los epicentros artísticos y culturales de la mediterránea y el sur de Europa, la ciudad de Barcelona se ha convertido en un lugar acogedor para la joyería contemporánea. Considerada uno de los epicentros de corrientes artísticas y culturales como el modernismo y el novecentismo, desde sus principios la joyería ha tenido Barcelona como referente a la hora de desarrollarse. La fundación del aula abierta de joyería en la Escola Massana en 1959 marcó un punto de inflexión para los orfebres, artesanos y artistas del país.
La corriente de la joyería contemporánea, que abogaba por una nueva manera de hacer joyería, se irá expandiendo a lo largo de los años setenta y ochenta. Algunos artesanos como Montserrat Guardiola, Sergi Aguilar o Teresa Casanovas formaban en los años setenta el denominado grupo “La joya como diseño”.
Paralelamente, Enric Majoral se había asentado en la isla de Formentera, donde el joyero catalán iniciaba un proceso creativo paralelo a las escuelas de joyería. En la década de los ochenta, Enric Majoral participa activamente en la creación de la feria de arte de La Mola. Unos años después, la tarea de Majoral empieza a ser valorada por el ecosistema de la joyería contemporánea catalana. La apertura de su primer taller-tienda de venta directa al público en Formentera causaría impacto entre los amantes de la joyería contemporánea.
Años 80: la joyería contemporánea de Majoral llega a Barcelona
La joyería contemporánea desarrollada por Enric Majoral en los años setenta en Formentera generó un creciente interés entre el público barcelonés. Así, el estímulo cultural y comercial generado en Barcelona alrededor de la joyería de Majoral lleva al autor catalán hacia Barcelona. La llegada de la joyería de autor de Majoral en Barcelona se inicia con la apertura de un taller-tienda en la calle Laforja, en el barrio de Sant Gervasi de la ciudad. El buen recibimiento por parte del público barcelonés hizo que Majoral abriera un segundo espacio de venta, esta vez en el centro comercial Pedralbes Centro.
La unión del taller con la tienda nace de la propia concepción de Enric Majoral del proceso de creación de la joyería contemporánea. Un proceso que no se termina hasta que la joya se luce sobre un cuerpo.
“El taller es un espacio íntimo, donde te sientes protegido; donde las herramientas se convierten en una extensión del propio cuerpo. Un espacio idóneo donde experimentar, aprender, distraerse e inspirarse”, asegura Enric.
La joyería de Majoral: un proyecto atemporal en constante evolución
El trabajo llevado a cabo por Majoral y otros joyeros contemporáneos en la ciudad en los años 80 hace que la joyería viviera un punto de inflexión en Barcelona durante aquella década.
Así, la joya cada vez coge más valor conceptual y artístico. La capital catalana se llena de exposiciones, catálogos y ferias internacionales que pretenden analizar el papel de las nuevas corrientes artísticas en la joyería. Al mismo tiempo, Majoral crea su propio lenguaje, dinámico y actual, que es reconocible para un público que empieza a entender la joyería como una forma más de expresión artística y de creación de su propia personalidad.
Pero lejos de permanecer con un estilo acotado, la propia esencia de la joyería de Majoral lleva a la empresa a evolucionar constantemente, buscando nuevas formas y nuevos lenguajes a través de la joyería. El proyecto de Majoral, siempre ligado a la cultura mediterránea y a la inspiración que otorga la naturaleza, coge un nuevo impulso con la llegada de Roc Majoral, hijo de Enric. Desde principios del siglo XXI, Majoral es un proyecto con dos creativos, que se esfuerzan en crear nuevos lenguajes dentro de la joyería.
La evolución de la joyería contemporánea de Majoral en Barcelona también la ha llevado a alinear sus valores en toda la cadena creativa y productiva. Así, Majoral empieza a crear un discurso que aboga por la necesidad de una joyería alineada con el respeto al medio natural, social y cultural. Desde 2012 Majoral trabaja con oro Fairmined, que garantiza el respeto al medio ambiente y a las personas en la extracción del oro.
Consell de Cent y Santa Fe de Nou Mèxic: los dos rincones donde se esconden las joyas de Majoral en Barcelona
La evolución de la joyería contemporánea de Majoral también ha ido acompañada de un progreso en su presencia en la ciudad de Barcelona. Actualmente, Majoral cuenta con dos tiendas en la capital catalana. Una, ubicada en el centro de la ciudad, en la calle Consell de Cent. La otra tienda de la firma catalana la encontramos en la calle Santa Fe de Nou Mèxic, en Sant Gervasi . Dos espacios que se unen a las otras tiendas de la empresa ubicadas en Ibiza y Formentera
Pero los talleres de Majoral, desde donde nacen todas sus creacions, no se encuentran solo en la isla de Formentera. La empresa catalana también tiene habilitado un taller en Barcelona, junto a sus oficinas centrales en el barrio del Poblenou.
La reflexión, la inspiración y los procesos creativos de Enric y Roc Majoral marcarán la evolución del proyecto artístico y profesional de Majoral. Un proyecto que siempre vinculará su joyería contemporánea con la ciudad de Barcelona.
